Los colores empleados en la decoración Shabby chic son los claros. Sutiles acentos en colores pastel como el verde, azul claro y rosa le dan el toque romántico a la sala.
Si el techo de la sala tiene vigas lo ideal es pintarlas de blanco, así la habitación parecerá más amplia y luminosa.
En un diseño de sala Shabby Chic también se puede decorar las paredes con papel pintado floral o textiles del mismo patrón.
El Shabby Chic goza de bastante popularidad, y gracias a ello muchas empresas de muebles se especializan y ofrecen productos en este estilo.
En una sala estilo Shabby Chic tampoco pueden faltar los muebles de aspecto desgastado.
Sofás y sillones tapizados en terciopelo y algodón son muy utilizados porque ayudan a crear un ambiente acogedor.
En una sala Shabby Chic la mesa de centro puede ser un modelo inglés, con las patas de fierro fundido y el apoyo de cristal o mármol.
Otra alternativa, es colocar en una de las esquinas de la sala una mesita baja de té con sillas.
En la decoración de una sala Shabby Chic los accesorios cumplen un papel importante. No pueden faltar vasos de cerámica, jarrones de cristal, lámparas de fierro y espejos de diferentes tamaños.
Para completar el efecto retro no pueden faltar cuadros con marcos de plata sobre estanterías o muebles.
Al decorar una sala Shabby Chic olvídese de los muebles coordinados, mezcle materiales, colores y formas. Muebles y accesorios de madera y fierro fundido no deben faltar.